Propuestas de mejora para el reglamento de la Ley de Eficiencia Energética (DS N°28) basadas en el desempeño del sector minero en Chile

Abstract

A partir de febrero de 2021, Chile dio un paso trascendental en su compromiso con la sostenibilidad y la gestión responsable de los recursos energéticos al implementar un marco normativo robusto para la eficiencia energética: la Ley 21.305. Esta legislación, pionera en la región, no solo busca optimizar el uso de la energía a nivel nacional, sino que también establece las bases para un desarrollo productivo más limpio y eficiente. Específicamente, el artículo 2 de esta ley se enfoca en los grandes consumidores de energía, un segmento crucial para el logro de los objetivos nacionales. Dicho artículo impone a estas entidades la obligatoriedad de implementar sistemas de gestión energética rigurosos y de reportar anualmente sus consumos al Ministerio de Energía, garantizando así una supervisión y trazabilidad continuas de su desempeño energético. Dentro de este panorama, la industria minera emerge como un actor protagónico. Su papel es innegable en la economía chilena, donde constituye un pilar fundamental del Producto Interno Bruto (PIB) y posiciona al país como uno de los exportadores de minerales más importantes a nivel global. Sin embargo, esta relevancia económica viene acompañada de un desafío significativo: un elevado consumo energético. Este consumo se ve impulsado por la complejidad y la escala de sus procesos productivos, que abarcan desde las etapas iniciales de extracción del mineral, su transporte, hasta los procesos de conminución (trituración y molienda), fundición y refinación. Cada una de estas fases demanda una cantidad considerable de energía, lo que convierte a la minería en un sector clave para las políticas de eficiencia energética(...). Starting in February 2021, Chile took a momentous step in its commitment to sustainability and responsible management of energy resources by implementing a robust regulatory framework for energy efficiency: Law 21,305. This legislation, a pioneer in the region, not only seeks to optimize energy use at the national level, but also lays the foundation for cleaner and more efficient productive development. Specifically, Article 2 of this law focuses on large energy consumers, a crucial segment for achieving national objectives. This article requires these entities to implement rigorous energy management systems and to report their consumption annually to the Ministry of Energy, thus ensuring continuous supervision and traceability of their energy performance. Within this panorama, the mining industry emerges as a leading player. Its role is undeniable in the Chilean economy, where it constitutes a fundamental pillar of the Gross Domestic Product (GDP) and positions the country as one of the most important mineral exporters globally. However, this economic relevance is accompanied by a significant challenge: high energy consumption. This consumption is driven by the complexity and scale of its productive processes, which range from the initial stages of mineral extraction, its transport, to comminution (crushing and grinding), smelting, and refining processes. Each of these phases demands a considerable amount of energy, which makes mining a key sector for energy efficiency policies(...).